La PIF, es una enfermedad vírica grave que afecta principalmente a los órganos vitales. El virus de la PIF es una mutacion de un tipo de coronavirus felino (FCoV) y puede causar graves daños a la salud de los gatos si no se trata a tiempo.
La mayoría de las infecciones FCoV, son asintomáticas. Sin embargo, en algunos casos, aparece un cuadro leve de enteritis. El coronavirus felino entra en el epitelio del intestino causando los siguientes síntomas:
Fiebre
Vómitos
Diarrea
Algunas cepas consiguen atravesar la pared del intestino y llegar a la sangre. A través de esta, colonizan el sistema linfático y entran en los macrófagos, camuflándose de la respuesta inmune. Así llegan a otros órganos, causando una infección sistémica, la peritonitis infecciosa felina (PIF).
Tipos de PIF
La PIF puede manifestarse en cuatro formas principales y en algunos casos, pueden aparecer combinadas: PIF húmeda, PIF seca, PIF ocular y PIF neurológica. En general, es posible que estos síntomas aparezcan de la siguiente manera: PIF húmeda, se produce una acumulación de líquido en la cavidad abdominal y/o torácica, lo que provoca síntomas como distensión abdominal, dificultad respiratoria y debilidad general. PIF seca, la enfermedad afecta principalmente a los órganos internos, formando granulomas en los riñones, hígado y cerebro, dando lugar a signos clínicos variables.
Síntomas de la PIF
Los síntomas de la peritonitis infecciosa causada por el coronavirus felino dependen, fundamentalmente, de la intensidad de la respuesta inmune del gato. Algunos de los síntomas que pueden tener son:
Fiebre
Anorexia
Cansancio
Malestar general
Pérdida de peso
Mucosidad
Estornudos
Disnea
Ictericia
Acumulación palpable de líquido en la cavidad peritoneal
Falta de coordinación
Convulsiones
El diagnóstico de la PIF en gatos implica un conjunto de análsis clínicos, entre ellos, biopsias, exámenes de sangre, entre otros, para descartar todas patologías posibles, ya que dar con un diagnóstico definitivo de la PIF en la actualidad, es muy difícil.
Tratamiento de la PIF
Hay un antiviral disponible en CuraPIF. El GS-441524 actúa inhibiendo la replicación del virus de la PIF, lo que ayuda a parar con la progresión de la enfermedad. Para más información sobre este tratamiento y su disponibilidad, puede consultar con cualquiera de nuestros expertos en el tratamiento. No automedique a su gato, ya que el GS solo para la replicación del virus y no trata otras dolencias.
Acuda a un médico veterinario.
Prevenir la enfermedad PIF en los gatos puede ser un reto, pero con el acompañamiento de un médico veterinario y usar un fármaco de realidad puede brindarle resultados muy favorables. No obstante, es importante mantener buenas prácticas de higiene, como la limpieza periódica de la caja de arena y el lavado de manos tras el contacto con los animales. Además, minimizar el estrés de los gatos y mantener un entorno saludable puede ayudar a reducir el riesgo de infección.
Publicado por: Curapif.com
Instagram: @Curapif América Latina
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